La locura de ser "profe"
Nunca se me había ocurrido la idea de dar clase, primero porque no sabía que es lo que podía enseñar a los demás, y lo segundo, porque cuando he tenido "alumnas" en el trabajo ha quedado patente que mi don de palabra deja mucho que desear.
Se me traba la lengua, uso repetidamente la coletilla "esto debería ser así..." y "supuestamente" (hablando de sanidad la verdad es que esto no es demasiado recomendable).
El caso es que una buena amiga (o mala, llegados a este punto ya no sé que pensar), me ofreció compartir con ella las clases de un curso de verano.
Y acepté, mema, mema y remema que soy.
Me he pasado tres semana corriendo de mi casa al hospital, del hospital a casa, de casa a la academis, de la academia a casa y otra vez de casa al hospital.
La academia, ese antro sin aire acondicionado, me hizo pensar que en el infierno deberían estar pasando menos calor que nosotros.Resultó que el ca... del encargado no me había dicho que la nuestra era la única clase en la que no había aire acondicionado (y que el resto de las aulas estaban vacias). Una vez solucionado el tema medioambiental, y las charlas de los alumnos y los nervios de la profa (yo), resulta que el ordenador de la academia no tiene "puerto USB", esto me habría sido completamente indiferente a no ser por el pequeño detalle de que todo lo que había preparado para las clases estaba en el ordenador, y que una servidora no tiene grabadora de cd, Nooooo, no pasa nada, nos llevamos todos los días el portatil (que pesa como una losa) a las tres de la tarde, en el transporte público, y corremos, porq no lleamos de vuelta al trabajo.
Otra cosa a solucionar,¿que se le explica a esta gente?, hace dos semanas que ya no sabía que contarles, exactamente después de cinco días de clase, así que cada día escudriño mis libros, me hago mis apuntes y luego preparo la clase, demencial.
No creo que funcione el que ponga un anuncio por palabras para que me secuestren o algo...si sabeis como puedo desaparecer avisadme, please.
Animo...ya no queda casi verano.
Se me traba la lengua, uso repetidamente la coletilla "esto debería ser así..." y "supuestamente" (hablando de sanidad la verdad es que esto no es demasiado recomendable).
El caso es que una buena amiga (o mala, llegados a este punto ya no sé que pensar), me ofreció compartir con ella las clases de un curso de verano.
Y acepté, mema, mema y remema que soy.
Me he pasado tres semana corriendo de mi casa al hospital, del hospital a casa, de casa a la academis, de la academia a casa y otra vez de casa al hospital.
La academia, ese antro sin aire acondicionado, me hizo pensar que en el infierno deberían estar pasando menos calor que nosotros.Resultó que el ca... del encargado no me había dicho que la nuestra era la única clase en la que no había aire acondicionado (y que el resto de las aulas estaban vacias). Una vez solucionado el tema medioambiental, y las charlas de los alumnos y los nervios de la profa (yo), resulta que el ordenador de la academia no tiene "puerto USB", esto me habría sido completamente indiferente a no ser por el pequeño detalle de que todo lo que había preparado para las clases estaba en el ordenador, y que una servidora no tiene grabadora de cd, Nooooo, no pasa nada, nos llevamos todos los días el portatil (que pesa como una losa) a las tres de la tarde, en el transporte público, y corremos, porq no lleamos de vuelta al trabajo.
Otra cosa a solucionar,¿que se le explica a esta gente?, hace dos semanas que ya no sabía que contarles, exactamente después de cinco días de clase, así que cada día escudriño mis libros, me hago mis apuntes y luego preparo la clase, demencial.
No creo que funcione el que ponga un anuncio por palabras para que me secuestren o algo...si sabeis como puedo desaparecer avisadme, please.
Animo...ya no queda casi verano.
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