Agosto

Hace tanto tiempo q no escribo q ya no me acordaba ni de como se llega a esta pagina. Llevo un buen rato dando vueltas por el ciberespacio buscandola, va a ser verdad q he perdido casi del todo la memoria.
Bueno, ya es casi oficial, el verano está terminandose, se acaba agosto, han llegado los anuncios de los Corticoles y de las ofertas de libros de Carrefur y por si fuera poco mi planilla de Septiembre da pánico.
Ahora, no es momento de lamentaciones. Las vacaciones de este año han empezado a parecerse a las de antes, aquellas en las q lo pasaba estupendamente.
No os he contado nada del Viaje, solo os diré, para no aburriros con detalles, q ha sido increible. Una pasada, precioso. No dejeis de apuntar Siria en vuestra lista de sitios pendientes por conocer y no olvideis tampoco Petra. No he encontrado allí a Indy pero me lo he pasado como una enena.
Y después del las vacaciones tenía pendiente otro acto social: La Boda de Chusita.
Este fin de semana nos hemos encaminado, en peregrinaje desde el trabajo, hasta Valladolid porq se casaba mi amiga "La Luengo".
No puedo decir q hacía mucho q no me reía tanto porq ya os digo q el verano está siendo productivo, pero si puedo contar q he sobrevivido a los ataques de un camarero, y q ahora soy una persona más fuerte.
El camarero de nuestra mesa era eso q podríamos llamar: "Un torpe".
Nunca te servía la comida por el mismo lado, con lo cual lo más facil es q te quemara o te rociara de agua o vino como les pasó a mis compas. Claro, q no contento con eso y como la bandeja del pescado debía pesar lo suyo, decidió "Apoyarla" sobre mi cabeza. Nada de laca, con lo q mejor se queda pegado el pelo es con la salsa de la merluza a la sidra, os lo puedo garantizar.
Como lo de la merzula lo hizo sirviendo por la izquierda, cuando llegó con la carne y se la sirvió a Miguel (q estaba a mi izquierda) por su derecha pensé q conmigo haría lo mismo, y me fui hacia la izquierda, pero el decidió q para q iba a moverse, mejor se giraba, y zas, con su hombro q me endiñó en mi maxilar...total, para q molestarse, q i perdona escuché.
Fué tal el estress al q me vi sometida q en el momento del helado tuve q levantarme, pánico es poco para describir lo q sentía.
En fin, el asunto nos proporcionó unas buenas risas y un trozo de tarta extra a Aitor por tratar bien al camarero...tiene gracia el asunto, y a mi q me dén, pero no el camarero...por favor.
Besitos a Chus y Fran (los novios) y a los compañeros del evento (Viva el acompañamiento).

Pd.- Otro día os cuento lo del Showman, no tiene desperdicio, y nosotros sin pedirle una tarjeta.