Vacaciones de verano

Verano del 2004.

Creo que no hace falta que confiese a los que me conocen que este no ha sido el mejor año de mi vida, supongo que puede no ser tampoco el peor y por eso cruzo los dedos.
El caso es que como no tenía nada interesante que hacer en vacaciones pues me busqué distintas tareas para mantenerme ocupada...y claro...me pasé.
Yo no soy demasiado activa, me encanta espanzurrarme en el sofá o pasarme horas charlando con los amigos del ciberespacio, pero de repente estoy inmersa en un universo de quehaceres diarios que no me dejan ni un solo minuto libre en el que me pueda parar a pensar.
Eureka, va a ser eso.
Resulta que, además de terminar extenuada cada día, de ir de un lado a otro para llegar a todos los sitios en los que debo personarme, se me ha descolocado ligermante el pensamiento.
Sip, a lo mejor el corte de pelo y el color que la peluquera considera caoba (y q el resto del planeta ve como naranja)también tiene que ver., no queda más remedio que reirse y tomar las cosas como llegan.
Así que este verano estoy de vacaciones mentales, si.
No quiero pensar en el trabajo nuevo ni en la vida de antes, solo quiero ver pasar los días, reirme mucho y pasar un poco menos de calor.
De momento no vamos mal, salgo de vez en cuando y algunos días me rio mucho ( el jueves casi no llego a trabajar, siento haber hablado tanto) y hace mucho q no pienso que estoy regular o mal, estoy y eso es genial.
A lo mejor al final este es uno de mis mejores veranos.
Cruzo los dedos