Agua

Yo que me las prometía tan felices. Toda la semana sin Pili. La casa para mi sola. Llevo esperando el viaje de mi madre no se cuanto tiempo, y zas, se va justo cuando yo estoy de noches. La casa para mi, solo para mi, para que yo duerma, claro.
En fin, al menos nada de limpiar el polvo cada cinco minutos ni de fregar el plato nada más terminar, nada de hacer orden, nada de..., nada de paz.
A ver, ¿como puede ser q el unico fin de semana q puedo estar en mi casa tranquila a la vecina de arriba se le atasque el tubo sifónico (ya he aprendido q no es sinfónico gracias a la cara de juerga del fontanero), inunde su baño y de retruque haga una gotera inmensa en el techo del
mio?.
Podía ser peor?, si, el fontanero de guardia no puede venir hasta las doce de la noche, y eso q le avisamos a las cuatro de la tarde (yo quiero trabajar de fontanero, o de carpintero o de ñapas en general).
Pues claro, como estoy de noches iba a ser q a las doce no, mejor por la mañana. Yo esperando al fontanero, en pijama y bata, sin poder meterme en la cama después de una guardia penosa en la q mi enferma insistia en quedarse conmigo pidiendo "Aguaaaa" a gritos.
Bueno, el señor fontanero apareció a las once de la mañana, yo ya dormida en el sofá, claro. Y dijo q no se podía más q esperar a q se seque. Ya veremos cuando venga Pili.